miércoles, 29 de agosto de 2012

Té verde

El té verde contiene compuestos antioxidantes que son muy beneficiosos para luchar frente a determinados tipos de cáncer y en la reducción de los efectos propios del envejecimiento.
Los principales activos que entran en la composición del té son los siguientes:
  • Agua y sales minerales: Las hojas contienen entre un 5 y un 6% de agua y entre un 4 y un 7% de sales minerales, en especial potasio y manganeso.
  • Acidos orgánicos: Otros compuestos minoritarios que también pueden encontrarse en el té son ácidos orgánicos como málico, succínico, oxálico y galoquínico, incluso un pequeño porcentaje de lípidos.
  • Compuestos glucídicos: El té contiene inositol, azúcares reductores, gomas y pectinas.
  • Polifenoles: El té se destaca por su contenido en compuestos polifenólicos (3%) que son los responsables de su actividad terapéutica y de su poder antioxidante. Los polifenoles disminuyen con la edad de la planta y con la época de recolección, para plantas de la misma edad, es menor en primavera y mayor en agosto y septiembre. Entre otros beneficios, los polifenoles del té serían buenos para el cerebro, retrasando la aparición de enfermedades degenerativas como el Alzheimer.
Los polifenoles del té son de tres tipos: flavonoides, catequinas o catecoles y taninos:
  1. Flavonoides: Entre los flavonoides del té, los más importantes son el kemferol, quercetol (quercitina) y miricetol. Además de aportar propiedades antioxidantes, los flavonoides del té protegen de enfermedades cardiovasculares.
  2. Catequinas: Los catecoles o catequinas son más abundantes en el te verde, que en el té negro y en la planta fresca. Los más activos son el catecol, epicatecol y sus ésteres con ácido gálico. Las catequinas del té son las responsables de sus efectos anticancerígenos.
  3. Taninos: El té también contiene taninos catéquicos condensados (8-25%). Los taninos se relacionan con las propiedades astringentes del té, útiles tanto para tratar la diarrea, como para por ejemplo, cicatrizar heridas. Sin embargo, dado que interfieren en la absorción de hierro, en ocasiones pueden agravar cuadros de anemia

  • Aceite esencial de té: Tiene una pequeña cantidad de aceite esencial (0.007-0.014% en las hojas frescas), menor que la del té negro, dado que se forma en el proceso de fermentación de las hojas.El aceite esencial de té contiene hexenol, y pequeñas cantidades de aldehidos, butiraldehido e isobuteraldehido, así como alcoholes fenólicos, geraniol, linalol y citral.
  • Alcaloides: Los alcaloides del té (2-4%) quizás sean los componentes más conocidos. Se trata de derivados de la purina, conocidos más comúnmente como 'bases xánticas', las más abundantes son la cafeína y la teofilina.En la planta fresca, la cafeína se encuentra combinada con los ácidos orgánicos formando un compuesto conocido como 'tanoide'. Por tal razón, el té negro tiene una acción más estimulante sobre el sistema nervioso, que el té verde puesto que durante el proceso de fermentación se rompe este tanoide dejando libre la cafeína.
  • Vitaminas y enzimas: Por último, el té contiene además, vitaminas y enzimas.
Diversas invenstigaciones han demostrado que el cunsumo de su extracto protege contra las siguientes enfermedades degenerativas:
  • Prevención del cáncer: La capacidad del té verde para prevenir el cáncer ha sido objeto de innumerables estudios que sugieren que sus componentes, en particular las catequinas, son los responsables de sus propiedades anticancerígenas. Los resultados de estos estudios señalan que tomar 3 tazas de te verde al día, ayudan a proteger contra el cáncer. Tal es así, que se especula que el té verde podría ser el motivo de la baja tasa de cáncer en Asia.
  • Prevención de enfermedades cardiovasculares: No sólo evita la aterosclerosis, gracias a sus efectos antioxidantes, sino que además, por sus efectos antitrombóticos, mejora la circulación sanguínea, ambos factores contribuyen eficazmente, en la prevención de muchas enfermedades cardiovasculares.

martes, 28 de agosto de 2012

Hipertensión

Esta enfermedad puede pasar inadvertida y es más frecuente a partir de los 40 años, aunque puede aparecer a cualquier edad.

¿QUÉ ES?
Es la elevación de los niveles de presión arterial de forma continua o sostenida. Para entenderlo mejor es importante definir la presión arterial. El corazón ejerce presión sobre las arterias para que éstas conduzcan la sangre hacia los diferentes órganos del cuerpo humano. Esta acción es lo que se conoce como presión arterial. La presión máxima se obtiene en cada contracción del corazón y la mínima, con cada relajación.

¿QUÉ SÍNTOMAS PRODUCE?
La sintomatología que puede acompañar a la hipertensión arterial es muy variada. Puede ocurrir que la hipertensión arterial no dé ninguna sintomatología y su descubrimiento sea causal (por revisiones médicas, cirugías, etc…).
En otras ocasiones, se descubre a raíz de la presencia de determinados síntomas como dolores de cabeza, hemorragias nasales espontáneas, sensación de inquietud, nerviosismo… y de forma menos frecuente por elevaciones bruscas y severas de la tensión arterial que se acompañan de dolor de cabeza intenso, sensación de frialdad y angustia, palpitaciones, temblor.
Las manifestaciones clínicas de la hipertensión dependen en gran parte de la posible causa que la puede originar. En determinados procesos el inicio de la hipertensión puede ser brusco con elevaciones severas de la tensión arterial en forma de crisis.

HIPERTENSIÓN ARTERIAL Y RIESGO CARDÍACO


¿POR QUÉ ES UN FACTOR DE RIESGO?
La hipertensión supone una mayor resistencia para el corazón, que responde aumentando su masa muscular (hipertrofia ventricular izquierda) para hacer frente a ese sobresfuerzo. Este incremento de la masa muscular acaba siendo perjudicial  porque no viene acompañado de un aumento equivalente del riego sanguíneo y puede producir insuficiencia coronaria y angina de pecho. Además, el músculo cardiaco se vuelve más irritable y se producen más arritmias.
En aquellos pacientes que ya han tenido un problema cardiovascular, la hipertensión puede intensificar el daño.
Propicia la arteriosclerosis (acumulación de colesterol en las arterias) y fenómenos de trombosis (pueden producir infarto de miocardio o infarto cerebral). En el peor de los casos, la hipertensión arterial puede reblandecer las paredes de la aorta y provocar su dilatación (aneurisma) o rotura (lo que inevitablemente causaría la muerte).

¿CÓMO AFECTA LA PRESIÓN ARTERIAL AL CEREBRO?
Cuando las arterias se vuelven rígidas y estrechas, el riego sanguíneo resulta insuficiente y provoca la aparición de infartos cerebrales (ictus o accidente vascular cerebral isquémico). La elevación de la presión arterial también puede causar la rotura de una arteria y ocasionar una hemorragia cerebral (ictus o accidente vascular cerebral hemorrágico).

¿CÓMO AFECTA LA PRESIÓN ARTERIAL A LOS RIÑONES?
La hipertensión causa rigidez en las arterias que suministran la sangre a los riñones. Pero también perjudica al propio riñón, lo que puede desembocar en una insuficiencia renal que incluso requiera diálisis. Por otro lado, si el riñón resulta dañado se puede producir un aumento de la presión arterial.

¿CÓMO AFECTA LA PRESIÓN ARTERIAL A OTROS ÓRGANOS?
Si afecta a las arterias de las piernas causa dolor al caminar. Si daña las arterias de la retina provoca alteraciones en la visión.
En los hombres puede causar impotencia.

HIPERTENSIÓN: DIAGNÓSTICO
El diagnóstico se basa en un sencillo procedimiento de medición, aunque en algunos casos son necesarias otras pruebas como el hotler de presión arterial. Es imprescindible completar el estudio con un análisis de laboratorio (de sangre y orina) y un electro cardiograma. Para facilitar un diagnóstico es muy importante tener presente estas recomendaciones:
  1. La hipertensión arterial no produce síntomas directos y puede pasar inadvertida.
  2. Es más frecuente a partir de los 40 años, aunque puede aparecer a cualquier edad.
  3. Hay predisposición familiar, aunque normalmente se da también en personas sin antecedentes.


FUENTE: Fundación Española del Corazón

lunes, 27 de agosto de 2012

El colesterol es una sustancia cerosa, de tipo grasosa, que existe naturalmente en todas las partes de, cuerpo. El cuerpo necesita determinada cantidad de colesterol para funcionar adecuadamente. Pero el exceso de colesterol en la sangre puede adherirse a las paredes arteriales. Esto se denomina placa. Las placas pueden estrechar las arterias o incluso obstruirlas, lo que irremediablemente lleva a padecer ECV y en la mayoría de los casos, la muerte.

Los niveles de colesterol elevados en la sangre pueden amentar el riesgo de enfermedades cardíacas. Los niveles de colesterol tienden a aumentar con la edad.  El aumento no suele tener signos ni síntomas, pero puede detectarse con un análisis de sangre. Usted tiene probabilidades de tener un nivel de colesterol alto si tiene antecedentes familiares, sobrepeso o consume muchas comidas grasosas

Cómo afecta el colesterol de nuestra alimentación al sistema circulatorio:



ARTERIOSCLEROSIS

La arteriosclerosis es un término general que designa a varias enfermedades que provocan engrosamiento y pérdida de elasticidad en la pared de las arterias. De ellas, la más importante y frecuente es la arteriosclerosis en la que la materia grasa se acumula debajo del revestimiento interno de la pared arterial. Suele afectar a las arterias del cerebro y a las de órganos vitales –como el cerebro, el corazón o riñones- así como a brazos y piernas. Si las zonas de engrosamiento o ateromas se desarrollan en las arterias carótidas –las que alimentan el cerebro- puede provocar un infarto cerebral y si lo hace en las arterias coronarias –las que alimentan el corazón- un infarto de miocardio.

Así pues, para encontrar una solución a la arteriosclerosis hay que ir más allá del colesterol. De hecho, hoy se sabe que los mayores culpables de que la arteria se deteriore son los radicales libres, fragmentos moleculares altamente reactivos que interactúan de forma rápida y agresiva con otras moléculas del cuerpo para crear células anormales. Y lo hacen penetrando en el ADN de la célula y cambiando su sello de identidad para que, desde ese momento, produzca células anormales que proliferan de forma incontrolada.

Fuente: Fundación Española del Corazón y Discovery Salud Magazine.

jueves, 16 de agosto de 2012

Los fallecidos en España por efectos adversos a los fármacos triplican a las víctimas de tráfico


Extrapolando datos de Estados Unidos se ha estimado que en España mueren cada año el triple de persones por efectos adversos de los fármacos que por accidentes de tráfico. Ello fue raíz de mi primer libro, “Traficantes de salud”. También me parece llamativo que cada lunes, los telediarios abran con la noticia del número de muertes en la carretera producidas durante el fin de semana, pero casi nunca tratan este asunto delas reacciones adverses mortales de los medicamentos. Podían hacer lo mismo cada lunes, primero las cifras de los fármacos, y luego de las carreteras. Mejor no frivolizar con un asunto (dos) tan serios.

El problema es que los fármacos, que suelen ser tóxicos, se usan mal, en dosis incorrectas, en el paciente no adecuado… además, se estima que al menos uno de cada tres enfermos no responde adecuadamente a los fármacos. Para Julio Benítez, catedrático de Farmacología de la Universidad de Extremadura:

resulta inaceptable en estos momentos que al menos 10 de cada 30 pacientes que acuden a las consultas y que están siendo tratados con terapias teóricamente correctas, no vayan a responder adecuadamente a las mismas, y es más, muchos de los incluso desarrollarán efectos adversos evitables”.

Estas críticas, inusuales en el establishment sanitario actual buscan promocionar la farmacogenética. Así se ha puesto de manifiesto en el transcurso de una mesa redonda, con el patrocinio de Roche, celebrada en el marco del 6º Congreso Europeo de Farmacología, que se ha realizado en Granada. Las de Benítez me recuerdan a aquellas otras declaraciones de Allen Roses, ex directivo del laboratorio GlaxoSmithKline (GSK):

más del 90% de las medicinas logran su efecto sólo entre el 30% y 50% de las persones”.

Roses también criticaba los fármacos convencionales a favor de la biotecnología aplicada a los medicamentos. En aquel momento, supongo que no seguirá en ello, había creado una empresa con dicha orientación. No es ningún secreto que convivimos con muchos medicamentos que son ineficaces además de peligrosos y que esto ha creado un grave problema de salud público que se llama iatrogenia: los daños en la salud provocados por el sistema sanitario.

Como podéis leer, la jornada estuvo patrocinada por el laboratorio Roche que, como he publicado hace poco, está siendo investigado por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) precisamente por ocultar muertes producidas por sus medicamentos. Los responsables de la empresa podrían haber ocultado hasta 15.161 muertes relacionadas con sus fármacos.

lunes, 6 de agosto de 2012

Antioxidantes

¿Qué son los antioxidantes?
Son unas sustancias existentes en determinados alimentos que nos protegen frente a los radicales libres, causantes de los procesos de envejecimiento y de algunas otras enfermedades.

¿Qué son los radicales libres?
Son moléculas “desequilibradas”, con átomos que tienen un electrón en capacidad de aparearse, por lo que son muy reactivos. Estos radicales recorren nuestro organismo intentando captar un electrón de las moléculas estables, con el fin de lograr su estabilidad electroquímica y con potenciales reacciones en cadenas destructoras de nuestras células.

Los antioxidantes y los radicales libres
Los antioxidantes retrasan el proceso de envejecimiento combatiendo la degeneración y muerte de las células que provocan los radicales libres. La incorporación de nuestro cuerpo para neutralizar los radicales libres a los que nos exponemos diariamente nos obliga a recurrir a alimentos con las propiedades antioxidantes con capacidad de neutralizarlos.


Antioxidantes y cáncer
Muchas investigaciones ponen énfasis en llevar dietas adecuadas que sean aliados activos contra el cáncer. Estas dietas parten de enzimas y sustancias antioxidantes de determinados alimentos que son ricos en los componentes naturales. Los mecanismos son diversos y van desde la inhibición hasta una reacción más activa del sistema inmunológico en general.


Alimentación y antienvejecimiento
Una dieta inadecuada, como parte del estilo de vida, contribuye al proceso del envejecimiento. Conocer el nivel de intolerancia a determinados alimentos y equilibrar la alimentación es una de las claves de la medicina antiedad.
La nutrición antienvejecimiento tiene como objetivo promover la salud, prevenir enfermedades y mejorar la calidad de vida, protegiendo el cuerpo y la mente con las proporciones óptimas de nutrientes y la selección adecuada de alimentos naturales, integrales y orgánicos.
El envejecimiento es un proceso basado, por una parte, en el factor genético y, por otra, en el factor ambiental, el cual contempla el estilo de vida que se lleva, factores emocionales, el estrés físico y mental, la contaminación ambiental y la alimentación.
Mientras que la herencia genética influye en un 25% aproximadamente en el envejecimiento, los estilos de vida tienen una influencia superior al 50%. Dentro de ese 50% se encuentran: la exposición a sustancias tóxicas como los pesticidas, los plaguicidas, los aditivos químicos en los alimentos, los humos químicos y la contaminación ambiental.


Está demostrado que una alimentación incompatible a nuestro organismo es una de las causas principales de formación de radicales libres. Los radicales libres son átomos o moléculas inestables, altamente reactivas que atacan los enlaces de proteínas de los tejidos, los fosfolípidos y los ácido nucleicos de las células. Al actuar, activan una reacción en cadena que podría incluso llevar a la muerte celular.
Mediante la incorporación de alimentos ricos en antioxidantes, fitoquímicos y evitando alimentos a los cuales se presenta intolerancia, ya estaremos dando el primer paso hacia nuestro equilibrio.

¿Qué debemos evitar principalmente?
Los antioxidantes son unas moléculas, principalmente vitaminas y oligoelementos, que actúan eliminando el exceso de radicales libres. Las personas que consumen diariamente alimentos ricos en antioxidantes almacenan estos nutrientes y están menos expuestas a sufrir esta erosión celular que produce, entre otras muchas cosas, el envejecimiento de la piel.

Camino a la inmortalidad
Camino a la inmortalidad” es un excelente documental que recorre diversas investigaciones científicas sobre envejecimiento que se están llevando a cabo en España. Los biólogos moleculares María Blasco y Manuel Serrano nos cuentan cómo han conseguido crear a “Triple”, un ratón transgénico que vive un 40% más de lo normal.
Gustavo Barja nos relata sus descubrimientos respecto a la importancia de la dieta para la longevidad. José Viña presenta un estudio sobre los genes de personas centenarias. Carlos López Otín nos habla de la vejez más dura, la precoz o progeria y reflexiona sobre lo que él denomina la “armonía molecular”, una receta de felicidad natural para el hombre animal, vulnerable y de momento, mortal.

Documental emitido el 25 de enero de 2012:
PDFs:
Informa “Radicales libres y antioxidantes”, por Gustavo Barja, Facultad Biología Universidad Complutense de Madrid: